La capacidad
para caminar hasta el final del campo
cuando acaba de perder
una de las cosas que mas quiere.
Los árboles se ven distintos desde acá.
Dos segundo más
y la voy a ver luchar
de nuevo
con sus fantasmas.
La lona perfectamente estirada
sobre el pasto que se resiste.
Ella repite
ella no lo sabe
yo imagino su diferencia.
Elegí ir por donde más te guste...
- Finales (6)
- Hijx (5)
- Más allá (1)
- Otros (39)
- Páginas llenas (6)
- Pueblo Esther; el lugar (12)
- Rio de Janeiro (43)
- Rosario - Cotidiano (34)
- Viajes (15)
- What? (4)
18.10.16
Simulacros
El jean
va a quedar en el suelo
manchado con el café
que volqué
hace un rato.
cuando dejes de temblar conmigo
aplicamos para el pami
Dejar de temblar.
Escapar del retrato
que dibujas
en el mantel de papel
en la terraza del bar.
Tu mano
empujando mi cabeza.
El viento atrae la locura
y el recuerdo del sauce
que se cayó.
Cuando sale el sol
nos quema el jardín.
Nos quema los ojos
en la discusión eterna
de tu miedo.
Tan tierno
tan así.
hay muchas cosas
que dependen
de que yo haga
las cosas bien
El muchas suena como demasiadas.
Porque no decís que no.
Decís que es mucho.
Unos anteojos
de marco negro
te quedarían tan bien.
La próxima vez
te voy a decir que sí
que le golpeemos la puerta
para saber que hay alguien más
que sabe de vos.
va a quedar en el suelo
manchado con el café
que volqué
hace un rato.
cuando dejes de temblar conmigo
aplicamos para el pami
Dejar de temblar.
Escapar del retrato
que dibujas
en el mantel de papel
en la terraza del bar.
Tu mano
empujando mi cabeza.
El viento atrae la locura
y el recuerdo del sauce
que se cayó.
Cuando sale el sol
nos quema el jardín.
Nos quema los ojos
en la discusión eterna
de tu miedo.
Tan tierno
tan así.
hay muchas cosas
que dependen
de que yo haga
las cosas bien
El muchas suena como demasiadas.
Porque no decís que no.
Decís que es mucho.
Unos anteojos
de marco negro
te quedarían tan bien.
La próxima vez
te voy a decir que sí
que le golpeemos la puerta
para saber que hay alguien más
que sabe de vos.
25.7.16
Errores
un payaso
observando desde afuera
una fiesta
que no le tocó vivir
no hay que preguntar
lo que es mejor
no saber
observando desde afuera
una fiesta
que no le tocó vivir
no hay que preguntar
lo que es mejor
no saber
7.6.16
Carteles
no escribir
hasta que puedas evitar
que la satisfacción del impulso
te hunda
en la espera
de la respuesta
hasta que puedas evitar
que la satisfacción del impulso
te hunda
en la espera
de la respuesta
30.5.16
Oráculos
¿Qué hago
con este impulso mundano
que recién y justo ahora
se expande
como mancha voraz
por todo mi tiempo?
No se rechaza un regalo.
Las luces del ascensor
van a abrir la interrogación
carcomiéndome
pequeñas y
múltiples.
Hacés números
para inventarme
certera
una singularidad
que disfruto expectante.
¿Pasó de nuevo?
Sí,
respondés desde el baño
e imagino
que apenas
un dejo de hartazgo
gana al monosílabo
porque de hecho
ya lo habías confirmado
una
y otra
y otra
vez.
Mientras pienso,
me alcanzás agua
en un vaso de plástico
que retirás de mis manos
apenas lo termino.
Carezco de voluntad.
Ya no ofrezco resistencia.
Es que ahora
es tan simple
como subirme encima tuyo
y rozar apenas
con los dedos
las palmas de tus manos.
¿Cómo eludir el deseo
de preguntarte por lo que yo no soy?
¿Cómo poner en jaque
las imágenes de aquello que acá no es?
Si hoy estoy más cerca de lo imposible
envuelta en una bruma
que cubre un recuerdo
en el que casi no puedo creer.
Las monedas están girando
sobre la mesa.
Profana convertida
te cedo el control
el tiempo
el tiempo y el impulso
son ahora
enteramente tuyos
11.5.16
Llegadas
Otro hotel,
otra cama.
Vuelvo a acomodar tu brazo
para que
después
no te quejes del calambre.
"Yo no aprendo más"
susurrás
apenas
ante lo repetido del gesto,
ante la iteración
de ese intento
mínimo,
protector.
Estás exhausto.
Yo me hubiera quedado
clavada en vos
el resto de la noche.
En ese momento,
como siempre,
no reacciono.
Soy la nena torpe
con la respuesta poco perspicaz
en el borde de la lengua.
¿Qué podes no haber aprendido vos?
¿Qué?
Demasiados dioses
para esta pobre profana
que enreda estrategias
en un intento burdo
por deslumbrarte
si creyera en algún Olimpo
pensaría que te pertenece
si dejara de creer en lo que prometés
pensaría que se abrió una brecha
al mismo tiempo que verificás
lo predicho
te enfrentás a lo inesperado
de la comprobación
¿Qué podrías no haber aprendido?
"yo no cojo con minas inteligente"
me retás después
como si la que no hubiera aprendido
fuera yo
como si mi sensualidad
que desborda
fuera superficial
te vanagloriás con esa soberbia
que buscás contener
porque sabés
(y en el fondo sabés que yo sé)
que es tu debilidad
¿Qué podrías no haber aprendido?
para vos solo hay arriba y abajo
gente que sube
gente que se queda
sabiduría
fortaleza
belleza
así
el cielo es
casi amarillo
y aunque insistas en que no
yo soy el gris
ni mediocridad
ni mérito
mi única resistencia:
obligarte una y otra vez
a rozar conmigo
creyendo en lo único que creo
la brecha
esa brecha
en la que el árbol
no tapa el bosque
otra cama.
Vuelvo a acomodar tu brazo
para que
después
no te quejes del calambre.
"Yo no aprendo más"
susurrás
apenas
ante lo repetido del gesto,
ante la iteración
de ese intento
mínimo,
protector.
Estás exhausto.
Yo me hubiera quedado
clavada en vos
el resto de la noche.
En ese momento,
como siempre,
no reacciono.
Soy la nena torpe
con la respuesta poco perspicaz
en el borde de la lengua.
¿Qué podes no haber aprendido vos?
¿Qué?
Demasiados dioses
para esta pobre profana
que enreda estrategias
en un intento burdo
por deslumbrarte
si creyera en algún Olimpo
pensaría que te pertenece
si dejara de creer en lo que prometés
pensaría que se abrió una brecha
al mismo tiempo que verificás
lo predicho
te enfrentás a lo inesperado
de la comprobación
¿Qué podrías no haber aprendido?
"yo no cojo con minas inteligente"
me retás después
como si la que no hubiera aprendido
fuera yo
como si mi sensualidad
que desborda
fuera superficial
te vanagloriás con esa soberbia
que buscás contener
porque sabés
(y en el fondo sabés que yo sé)
que es tu debilidad
¿Qué podrías no haber aprendido?
para vos solo hay arriba y abajo
gente que sube
gente que se queda
sabiduría
fortaleza
belleza
así
el cielo es
casi amarillo
y aunque insistas en que no
yo soy el gris
ni mediocridad
ni mérito
mi única resistencia:
obligarte una y otra vez
a rozar conmigo
creyendo en lo único que creo
la brecha
esa brecha
en la que el árbol
no tapa el bosque
24.4.16
Reinos
¿Qué hacés
a las seis de la mañana
en el lugar
donde nos encontramos
por primera vez?
No volvés de ninguna parte,
eso seguro
vos no sos
o ya no sos
como el resto
¿qué te despertó?
La ropa lavada
de los que quiero
es una tarea silenciosa.
Imaginarlos también.
También recordarlos.
Ordenar el placar.
Saber dónde va cada cosa.
el viento del desierto
hiela tus pupilas
y calculás el tiempo exacto
para volver a abrirlos
entre torres de petroleo
la nieve
en el borde de tus pestañas
si me quedo ahora
no es para poder
sino para aprender
y el aprendizaje es amor
pero a la vez hurto
de esa determinación
esa frialdad
que yo
todavía
no poseo
a las seis de la mañana
en el lugar
donde nos encontramos
por primera vez?
No volvés de ninguna parte,
eso seguro
vos no sos
o ya no sos
como el resto
¿qué te despertó?
La ropa lavada
de los que quiero
es una tarea silenciosa.
Imaginarlos también.
También recordarlos.
Ordenar el placar.
Saber dónde va cada cosa.
el viento del desierto
hiela tus pupilas
y calculás el tiempo exacto
para volver a abrirlos
entre torres de petroleo
la nieve
en el borde de tus pestañas
si me quedo ahora
no es para poder
sino para aprender
y el aprendizaje es amor
pero a la vez hurto
de esa determinación
esa frialdad
que yo
todavía
no poseo
22.4.16
Varios
La sensibilidad exacerbada
por el orgasmo no esperado
aletea en las tripas
hasta apropiarse de la nuca.
Anoche...
anoche me hubiera quedado
para siempre
en las caricias mínimas
con las que seguís dibujando,
apenas,
mis manos.
Demasiadas variables
para coordinar
en una constante
que,
de última,
no deseo.
"Es como si te viera desnuda
por primera vez"
Tienen mi vida
pero quieren estaquearme
en una expertise
que,
para burlarlos,
invento
y que no es
ni apenas
importante.
las camas
las sábanas
las alfombras
el piso frío
pero reconfortante
El exceso
que no se va,
la falta
virtual
que se apoltrona
en su seguridad cobarde
y esta cotidianidad
que no es rutina.
un campo imaginario
un satori imaginario
caballos de polo imaginarios
amores imaginarios
Y a mí,
de tanto pensarlos,
en esta comunidad anárquica
que
gracias a vos
entretejo desafiante,
...a mí
al final
(muy al final)
me duele hasta ese alma
en la que aún hoy
no creo.
por el orgasmo no esperado
aletea en las tripas
hasta apropiarse de la nuca.
Anoche...
anoche me hubiera quedado
para siempre
en las caricias mínimas
con las que seguís dibujando,
apenas,
mis manos.
Demasiadas variables
para coordinar
en una constante
que,
de última,
no deseo.
"Es como si te viera desnuda
por primera vez"
Tienen mi vida
pero quieren estaquearme
en una expertise
que,
para burlarlos,
invento
y que no es
ni apenas
importante.
las camas
las sábanas
las alfombras
el piso frío
pero reconfortante
El exceso
que no se va,
la falta
virtual
que se apoltrona
en su seguridad cobarde
y esta cotidianidad
que no es rutina.
un campo imaginario
un satori imaginario
caballos de polo imaginarios
amores imaginarios
Y a mí,
de tanto pensarlos,
en esta comunidad anárquica
que
gracias a vos
entretejo desafiante,
...a mí
al final
(muy al final)
me duele hasta ese alma
en la que aún hoy
no creo.
21.4.16
Pasado
La abstinencia clava sus dientes
y rasga la piel.
Esta vez la alfombra era azul
y las almohadas se acumulaban
sobre las sábanas blancas.
Hoy,
la tortura lenta
de desprenderse del orgasmo ya sabido
que se repite
punzante
en el estómago.
Dormir,
dormir el resto de tu eternidad
tan bien fundamentada.
¿Vale la pena?
Lloro escondida
de la cotidianidad que me rodea
para no asfixiarme.
El valor del desequilibrio
sostiene la convicción
de tu argumento.
La cobardía
es tu embestida perfecta.
Hoy...
hoy
vos ya no podes conformarte.
Yo no puedo resistirme,
pero vos no podes conformarte.
no es simétrico
no es simétrico
no es simétrico
Pero hay algo
algo que resguardo
en el último resquicio de mi silencio:
yo no soy
una princesa que sale del capullo
por más que seamos pocas
por más que me deleite
con reyes vikingos
que nos desfloran
yo no soy
eso
que vos tan bien creés comprender
soy
el cangrejo
que se esconde sin su piel
en el fondo de la pecera
en esta revolución
en la que no podes creer
como yo no puedo creer
en el dios que me imponés
y rasga la piel.
Esta vez la alfombra era azul
y las almohadas se acumulaban
sobre las sábanas blancas.
Hoy,
la tortura lenta
de desprenderse del orgasmo ya sabido
que se repite
punzante
en el estómago.
Dormir,
dormir el resto de tu eternidad
tan bien fundamentada.
¿Vale la pena?
Lloro escondida
de la cotidianidad que me rodea
para no asfixiarme.
El valor del desequilibrio
sostiene la convicción
de tu argumento.
La cobardía
es tu embestida perfecta.
Hoy...
hoy
vos ya no podes conformarte.
Yo no puedo resistirme,
pero vos no podes conformarte.
no es simétrico
no es simétrico
no es simétrico
Pero hay algo
algo que resguardo
en el último resquicio de mi silencio:
yo no soy
una princesa que sale del capullo
por más que seamos pocas
por más que me deleite
con reyes vikingos
que nos desfloran
yo no soy
eso
que vos tan bien creés comprender
soy
el cangrejo
que se esconde sin su piel
en el fondo de la pecera
en esta revolución
en la que no podes creer
como yo no puedo creer
en el dios que me imponés
31.3.16
Salidas
Mirás otra cosa
y yo no estoy.
Despacio,
voy recorriendo tus gestos:
la comisura de tu boca,
tu barba de un par de días,
tus pies apenas levantados.
El suelo nuevamente se extiende verde,
el cielo espectral
y yo sólo veo
a través de los ojos de ella.
Yo no estoy.
Tu amor se me resbala
entre los dedos de la mano,
mientras alrededor fracasa
la revolución que no supimos inventar.
Es cuestión de horas
para que todo se hunda.
Va a bastar con una brisa suave
que vuele los papeles del escritorio.
Es ahí cuando vos entras en razón
y te das cuenta
que a las chicas como yo
no se las invita a cenar
no vale la pena
para qué
se las abraza mejor en la puerta del colegio
así creen otra cosa
así se fractura para siempre
la aptitud para la belleza
yo no estoy
si había una posibilidad de desandar la historia
se va a ir con tu mirada
y voy a envejecer 1000 años
no
no va a haber julio con vos
cuando la marca es grande
hasta el santo desconfía
y yo
aunque aún no te hayas dado cuenta
aunque me dejes planear el fin del mundo
yo no soy
la clase de chica
a la que vos
invitás
a cenar
y yo no estoy.
Despacio,
voy recorriendo tus gestos:
la comisura de tu boca,
tu barba de un par de días,
tus pies apenas levantados.
El suelo nuevamente se extiende verde,
el cielo espectral
y yo sólo veo
a través de los ojos de ella.
Yo no estoy.
Tu amor se me resbala
entre los dedos de la mano,
mientras alrededor fracasa
la revolución que no supimos inventar.
Es cuestión de horas
para que todo se hunda.
Va a bastar con una brisa suave
que vuele los papeles del escritorio.
Es ahí cuando vos entras en razón
y te das cuenta
que a las chicas como yo
no se las invita a cenar
no vale la pena
para qué
se las abraza mejor en la puerta del colegio
así creen otra cosa
así se fractura para siempre
la aptitud para la belleza
yo no estoy
si había una posibilidad de desandar la historia
se va a ir con tu mirada
y voy a envejecer 1000 años
no
no va a haber julio con vos
cuando la marca es grande
hasta el santo desconfía
y yo
aunque aún no te hayas dado cuenta
aunque me dejes planear el fin del mundo
yo no soy
la clase de chica
a la que vos
invitás
a cenar
22.3.16
Germen
es tan extraña esta espera
el recorrer impávida
el borde del precipicio
demorando
ansiosa
el vacío
la brizna de pasto
en la costa desgastada
por el fluir ajeno
la manera en que se desencadena la catástrofe
habilita las posibilidades de la supervivencia
trato de recordar
el momento justo
del gesto
con el que apenas
me obligás
a mirarte
¿hay final
si nadie sabe
lo que se acaba?
intento vano
por sincronizar el desamor
acá
en el campo
las luciérnagas no están extintas,
se multiplican
en su danza de deseo
desarmando,
sin que nadie lo sepa,
el discurrir del ensayista
sólo yo lo veo
me regalaste la excepción
y no voy a devolvértela
la sonrisa
los pies callados
la mirada insistente
¿hay final
si nadie sabe
lo que se acaba?
el cuerpo
va a comenzar a deformarse
despacio
no van a convencerme
del valor de lo mínimo
voy a quedarme debajo de la gran luz
sin dar lugar al matiz
aunque me queme
aunque me quemen
aunque me digan
(nos digan)
que no
que así no
que ya no
¿hay final
si nadie sabe
lo que se acaba?
la otra revolución
(esa que estás dejando ir
amor
cuando te callás
como ahora
volviéndote protagonista de un final
que todavía desconocés)
la otra revolución
persiste vacilante
insistiendo en una radicalidad
que todavía no aprehendimos
y que deberíamos gritar
orgullosos
prepotentes
altivos
si hay dialéctica
no se vuelve del salto
y yo ya no puedo el silencio
no puedo ser la ocasión
no puedo contener la urgencia
un final sin final
que se consume
en lo que los otros
no saben
pero que yo puedo
perfectamente
ahora
después de tu cama
imaginar
el recorrer impávida
el borde del precipicio
demorando
ansiosa
el vacío
la brizna de pasto
en la costa desgastada
por el fluir ajeno
la manera en que se desencadena la catástrofe
habilita las posibilidades de la supervivencia
trato de recordar
el momento justo
del gesto
con el que apenas
me obligás
a mirarte
¿hay final
si nadie sabe
lo que se acaba?
intento vano
por sincronizar el desamor
acá
en el campo
las luciérnagas no están extintas,
se multiplican
en su danza de deseo
desarmando,
sin que nadie lo sepa,
el discurrir del ensayista
sólo yo lo veo
me regalaste la excepción
y no voy a devolvértela
la sonrisa
los pies callados
la mirada insistente
¿hay final
si nadie sabe
lo que se acaba?
el cuerpo
va a comenzar a deformarse
despacio
no van a convencerme
del valor de lo mínimo
voy a quedarme debajo de la gran luz
sin dar lugar al matiz
aunque me queme
aunque me quemen
aunque me digan
(nos digan)
que no
que así no
que ya no
¿hay final
si nadie sabe
lo que se acaba?
la otra revolución
(esa que estás dejando ir
amor
cuando te callás
como ahora
volviéndote protagonista de un final
que todavía desconocés)
la otra revolución
persiste vacilante
insistiendo en una radicalidad
que todavía no aprehendimos
y que deberíamos gritar
orgullosos
prepotentes
altivos
si hay dialéctica
no se vuelve del salto
y yo ya no puedo el silencio
no puedo ser la ocasión
no puedo contener la urgencia
un final sin final
que se consume
en lo que los otros
no saben
pero que yo puedo
perfectamente
ahora
después de tu cama
imaginar
25.2.16
Equilibrio
hay veces
demasiadas veces
en que me pregunto
paladeando la idea
como si fuera un resabio que queda en la boca
después del beso
o después de lamer tu estomago
decía
me pregunto
despacio
para no apurar la respuesta
si me amarías
si supieras
que jamás te diría que no
que basta
que ya no
el estándar que usás para protegerte
me favorece
porque yo no soy
pero no se si vos podrías
si no lo fuera
entonces me quedo en el insulto
que es el lugar seguro
y elijo
no mostrarte
que hay otra manera
vos que sabés de tantas formas
y de tantas bellezas
y de tantas mujeres
si el colibrí vate alas
se avecina la tormenta
yo soy la ternura callada
el entreluz
la caricia de la alfombra
en el borde de los dedos
excesiva
excesiva
excesiva
sí
como no te cansas de repetir
aunque al lado tuyocualquiera
o casi cualquiera
más aún yo
sea puro centro
el sitio que se resguarda de la locura
pero también
y por eso es imposible
el foco sobre el que caen
estridentes
las luces
demasiadas veces
en que me pregunto
paladeando la idea
como si fuera un resabio que queda en la boca
después del beso
o después de lamer tu estomago
decía
me pregunto
despacio
para no apurar la respuesta
si me amarías
si supieras
que jamás te diría que no
que basta
que ya no
el estándar que usás para protegerte
me favorece
porque yo no soy
pero no se si vos podrías
si no lo fuera
entonces me quedo en el insulto
que es el lugar seguro
y elijo
no mostrarte
que hay otra manera
vos que sabés de tantas formas
y de tantas bellezas
y de tantas mujeres
si el colibrí vate alas
se avecina la tormenta
yo soy la ternura callada
el entreluz
la caricia de la alfombra
en el borde de los dedos
excesiva
excesiva
excesiva
sí
como no te cansas de repetir
aunque al lado tuyocualquiera
o casi cualquiera
más aún yo
sea puro centro
el sitio que se resguarda de la locura
pero también
y por eso es imposible
el foco sobre el que caen
estridentes
las luces
18.2.16
No
Él apagó el ventilador
y el silencio se hizo enorme.
Él
Las condicionales se repiten
intentando el juego
de un presente que no es.
¿Llamarte para irnos dónde?
El beso furtivo,
apenas suave,
se vuelve insistente.
Los pronombres se mezclan
y ya no se dónde es
acá.
Quiero la soledad del aeropuerto
de nuevo
Quiero el instinto maternal
de nuevo
Quiero el entreluz
de nuevo
Tu cama de nuevo
Su cama
Él
que lleva más tiempo
insiste en mi cuerpo
y vos
viva la paradoja
preferirías que mi deseo se calle
Aquel...
...casi me olvido de aquel...
La palabra no es lujuria
y a veces extraño
¿Qué pretendés?
¿Que te mire y no me moje?
No entendés lo que pedís.
Ni cerca
Ni de cerca
Cuando me acaricias suave los pies
Cuando esos pies ya no dicen nada
Cuando no es hotel
Que loco que vos
justo vos
que me descubriste como nadie
que me sedujiste como nadie
como ni él
ni él
pudieron
(y esto es lo que te debo
el secreto que no revelo)
me digas que no queres
que mis piernas se crucen
ah no al reves
que no querés
justo vos
maestro del desborde
que los límites
se vuelvan inútiles
Hay cosas,
hay cosas
que no cedo.
y el silencio se hizo enorme.
Él
Las condicionales se repiten
intentando el juego
de un presente que no es.
¿Llamarte para irnos dónde?
El beso furtivo,
apenas suave,
se vuelve insistente.
Los pronombres se mezclan
y ya no se dónde es
acá.
Quiero la soledad del aeropuerto
de nuevo
Quiero el instinto maternal
de nuevo
Quiero el entreluz
de nuevo
Tu cama de nuevo
Su cama
Él
que lleva más tiempo
insiste en mi cuerpo
y vos
viva la paradoja
preferirías que mi deseo se calle
Aquel...
...casi me olvido de aquel...
La palabra no es lujuria
y a veces extraño
¿Qué pretendés?
¿Que te mire y no me moje?
No entendés lo que pedís.
Ni cerca
Ni de cerca
Cuando me acaricias suave los pies
Cuando esos pies ya no dicen nada
Cuando no es hotel
Que loco que vos
justo vos
que me descubriste como nadie
que me sedujiste como nadie
como ni él
ni él
pudieron
(y esto es lo que te debo
el secreto que no revelo)
me digas que no queres
que mis piernas se crucen
ah no al reves
que no querés
justo vos
maestro del desborde
que los límites
se vuelvan inútiles
Hay cosas,
hay cosas
que no cedo.
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